La luz azul y sus efectos en los niños
Hoy en día, vemos que los más pequeños del hogar están accediendo a dispositivos móviles más horas al día. Gracias a la llegada de la pandemia y con ella la nueva modalidad on line. Los padres hemos visto que ya termina siendo un mal necesario, y mientras crecen son más las horas que pasan frente al computador o a los dispositivos móviles. Esto supone un riesgo para sus ojos ya que sus cristalinos son mucho más transparentes y susceptibles a este tipo de luces.
De hecho, se ha demostrado que los cristalinos de los niños absorben 6 veces más radiación UV dañina que los adultos. Por eso es que todas las consecuencias nefastas que tenemos los adultos con respecto a esta luz azul la tendrán los niños ya que son mucho más susceptibles.
Consecuencias:
Las pantallas led transmiten una luz visible de alta energía, la luz del sol es la natural sin embargo estas pantallas crean una sobre exposición de la misma. El aumento de la exposición es un factor de riesgo para el desarrollo de la miopía en los niños, este aumento de las pantallas en las últimas décadas ha desencadenado esta consecuencia.
Malas posturas, cuando vemos las computadoras o estamos con el dispositivo electrónico en frente, tendemos a “relajarnos” más de lo usual, así que empezamos a tener posturas incorrectas haciendo que a la larga tengamos contracturas musculares.
Los niños se exponen a ciberacoso, bien sabemos que el Internet es una fuente de información pero también puede ser una fuente de desinformación y pueden estar expuestos a influencias nocivas.
¿Qué hacer?
Seamos realistas, no creo que viviendo en esta época sea posible quitarle la tablet o el computador, sin embargo, podríamos tener equilibrio en el uso de este ya que ciertamente puede ser muy adictivo quedarse horas divagando en la red.
Fomentar descansos visuales y poner límites de tiempo es ideal ya que no solo le servirá para desconectar mente sino también, activar el cuerpo. Estirarse por ejemplo es una buena opción en estas pausas y por qué no, salir a patear una pelota.
Bajar el brillo del computador y sobre todo cuando están cerca de las horas de dormir.
Hacer revisiones anuales de su visión, llevarlo al chequeo médico periódicamente es importantísimo. No esperemos hasta el día que tu hijo te diga que no se ve bien.
Usa lentes que lo protejan de la luz azul, esta es una excelente herramienta para evitar las consecuencias que hablamos anteriormente. Los lentes de filtro azul son diseñados específicamente para descansar la vista y permiten un confort visual.